Aunque caiga la flor, queda la rama....
Y la rama queda para hacer nido....A veces tengo miedo de ceder a la tentación,apoltronarme, dejarme llevar,mi
tiempo va pasando y mi aguante no es el mismo.Tengo la sensación de estar
pasando del verano al otoño de mi existencia y no haber hecho lo suficiente,
no haber aprendido todo lo que hubiera querido.
Mi vida ha sido una lucha constante y nunca me faltaron ni empuje, ni arres-
tos para encararla.Pero de un tiempo a esta parte mi talante ha cambiado y
tengo miedo de dejar de ser fuerte,de unirme a la corriente y dejar de nadar
en contra de ella.......es mucho más fácil, más cómodo.....¡¡pero me niego!!
Cada momento, pensamiento,acción y experiencia define quienes somos
y quienes seremos.....como dijo José Ortega y Gasset,"yo soy yo y mis cir-
cunstancias".
A mí me gusta ser así,no comulgar obligatoriamente con la masa,aun-
que eso me reporte en ocasiones problemas.Tengo capacidad autocrítica y
la sigo ejercitando, aunque eso me suponga rechazo por parte de aquellos
que no obtienen la respuesta que ellos quieren que les dé.
Y aunque a veces creas que vas a sucumbir.....nunca sabes lo
fuerte que eres, hasta que ser fuerte es tu única
opción.
También es verdad que mucho tiempo sacrificándote puede hacerte
roca el corazón, y hacer que éste vaya desgastándose,moldeándose y
afilándose, como las rocas de este paisaje.
Aunque, no es menos cierto,que aunque el original cambie,no por eso
tiene que dejar de ser igual de bello....
Ese toque de luz que da el Otoño a las montañas, que creciendo desde su base tocan el cielo, desde el valle abierto. Nos envuelve y nos relaja,nos da paz y sosiego.
Envidio el vuelo del ave....libre, a su aire, mi corazón también tiene alas,eso es lo que lo sostiene, solamente se arrastra, aquel que en el suyo no las lleva.....
¡¡Que distinto el otoño para mí que me voy que
para tí que te quedas!!........